CUENTOS

Cuentos de miedo (2) Los fantasmas y lo gótico.
Publicado el 20, abril, 2009 por Ares Cronida
La historias de terror como tal se inician en el siglo XVII, la lucha entre los racionalistas de la época que buscaban una explicación lógica de los eventos (surgimiento de las primeras ciencias naturales), ante ellos el arte se mueve al otro lado, plantea la existencia de cosas no razonables. La novela gótica, principalmente la inglesa, nos introduce en ambientes desconocidos, sitios y tiempos muy distintos a los que conoce el lector. Los personajes de las obras son enigmáticos, esconden sus secretos, llenos de culpa, aunque inteligentes son mostrados al lector en palabra, obra y pensamiento. Existen los villanos, y siempre hay una heroína (víctima incapaz de solucionar sola sus problemas) que debe ser salvada del peligro por el héroe enamorado.



Los fantasmas han aparecido en obras desde siglos atrás, entre las más famosas podemos citar a Hamlet de William Shakespeare (1599/1601); trata sobre el príncipe de Dinamarca, cuyo padre a muerto y su madre casa en segundas nupcias con su tío Claudio. La aparición del fantasma del padre alerta al joven sobre el causante de su muerte, su tío; provocando ello acontecimientos y traiciones que acaban con toda la familia real.



El Castillo de Otranto (1764) de Horace Walpole: es el primer ejemplo de estas historias. La historia narra como el príncipe Manfred, con una esposa devota y dos hijos: Conrad, el débil, a quien quería, y Matilde, virtuosa y también débil, a quien no quería decide para legitimar su poder en el principado (era un usurpador), casando a Conrad con Isabella. Pero Conrad muere aplastado el día de su boda y culpan al joven Teodoro (amante de la joven novia). Entonces Manfred mismo decide casarse con Isabella, repudiando a su esposa Hipólita; usando al débil Fray Jerónimo, que vivía a la sombra del castillo, para que anule el legítimo matrimonio. Isabella, horrorizada, escapa y se refugia en un convento con ayuda de Fray Jerónimo, quien descubre que es el padre de Teodoro. En eso aparece el Caballero de la Espada Gigantesca a reclamar la propiedad del castillo, Teodoro lo mata sin querer, resultando la victima ser el padre de Isabella. Mientras Manfred que trata de hacer su voluntad, mata sin querer a Matilda de una puñalada por la espalda. Horrorizado por su crimen se interna en un convento, igual que su esposa, mientras Teodoro e Isabella se casan y quedan como los legítimos propietarios del castillo. La historia en si es una serie de dramas absurdos, accidentes extraños, rollos amorosos y por supuesto la presencia de fantasmas, pero esta obra asentó los elementos fundamentales del género gótico: viejos castillos, apariciones fantasmales, bosques umbríos, etc. Walpole había creado unos personajes y un escenario que en manos más diestras darían lugar luego a grandes historias de terror y fantasmas.









Entre los cuentos de fantasmas hay cuatro importantes en la literatura infantil, los cuales mencionaremos a continuación, a modo de ilustración.

Juan Sin miedo, de los Hermanos Grimm (1812/1857), es la historia de un joven que no sabe lo que es el miedo, dispuesto a aprender llega a un castillo esperando que los fantasmas le permitan sentir los escalofríos. El fantasma falla en su intento de asustar al joven, abandonado el castillo y su tesoro. Al final es la princesa liberada quien le enseña los escalofríos al introducirle entre la ropa fríos peces vivos que le hacen brincar.



La leyenda de Sleepy Hollow, (1820) escrita por Washington Irving narra la historia de Ichabod Crane, un escéptico profesor de escuela de paso por el pueblo Sleepy Hollow en el estado de NewYord, no hace caso de las historias sobre un jinete sin cabeza, más interesado por la hermosa Katrina Van Tassel, el maestro trata de alejarla de su novio Brom Bones, hasta la noche que es perseguido por el jinete fantasma.



Cuento de Navidad, (1843) de Charles Dickens, es la historia de un avaro que es visitado en la víspera de navidad por cuatro fantasmas (el primero es un colega difunto), para avisarle que si no cambia su conducta lo espera un destino terrible en el otro mundo.









El Fantasma de Canterville, (1887) de Oscar Wilde; cuenta la historia de una familia americana que se muda a la mansión inglesa de Canterville. Habitada por un fantasma hostil, que hace la vida imposible a los nuevos habitantes y donde la hija de la familia interviene para liberar al fantasma de su castigo eterno. Novela donde se mezclan de forma humorística el gusto por los fantasmas que hay en Inglaterra y la visión moderna y escéptica de los norteamericanos a ese tipo de historias.